Parte dos - Día uno

Día uno (tarde): Hacia la Isla de Cristal

- Indestempus -Susurró Soro y desapareció.

Nadie pareció darse cuenta. Habían llegado a Gokstad, y con ellos, una carta del general de los Nordos.

- Uf, ¿qué querrá ahora? -Se quejó Thof
- "Nos informó Gosfer... -Comenzó a leer Goll- ...que su hermano, Gasser, fue a la Isla de Cristal y no volvió. Fue a bucarlo hace unos días y sigue sin volver. Esto es muy extraño así que vamos a hacer una expedición. Lo ideal sería presentarse en el Descenso de Herulf, la próxima luna menguante cuando se pueda ver. Saludos desde Montsognir, el capitán Berderik Makihfer."
- Qué extraño, ¿qué les habrá pasado?
- Y eso que los Utghars son fieras en serio, ¿eh? ¡Jaja! -Nadie le hizo caso a su tonta broma, exceptuando un par de Nordos que lo miraron con mala cara.
- Khor, ¿tenías ganas de hacer algo por tu reino? -Al enano se le dibujó una enorme sonrisa en su barbuda cara- La princesa debería quedarse acá, y Livh no puede estarse sola en un reino que no es el suyo. ¿Te puedo pedir que te quedes con ellas? -Al decir estas palabras, fue como si su boca se halla dado vuelta.
- Uy, está bien
- ¡Sabía que podrías hacerlo!
- ¿Cuánto tiempo pensás que vamos a estar en la Isla de Cristal? -Preguntó Goll.
- No sé, por eso estoy haciendo esto. No quiero que nada valla a salir mal
- Prometo cuidar de estas dos hermosuras extranjeras
- Haalem -Llamó Thof a la princesa- Dusim Velok Dor Ul Khor ("Princesa, ustedes se van a quedar con Khor")
- Etzel ("No hay problema")

Thof agarró lo necesario y lo puso en su bolso de viaje. Luego se marchó con Goll e Íewen a Montsognir, donde ellos tenían sus casas.

- Así que en Syrtis tienen una taberna llamada "El Emporio de las Bailarinas"
- Exactamente, antes cantaba allí. Era divertido, aunque te cansabas de acostarte tarde todos los días
- Me imagino... -Suspiró- Yo siempre fui muy responsable, ¿sabe?
- Jeje, ¿en serio?
- Sí, sí... Al ser guardia persona de Baldrik Hammerstriker en el pasado y actual líder y capitán del clan Avalancha, uno tiene que ser muy responsable
- Guau, ¿guardia de Baldrik Hammerstriker? Debe haber sido muy importante para usted. Y... -Rió- a todo esto, ¿quién es Baldrik Hammerstriker?
- ¿¡!?
- ¡No lo tome así! Usted sabe que yo... Jeje, estuve pocas veces por acá
- Bueno, pero creí que...
- Crea lo que crea, es IMPOSIBLE que recuerde un nombre tan difícil en taaaaanto tiempo

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- ¿Ya está? -Preguntó Íewen impaciente. Estaba esperando que Goll se pusiera su nuevo uniforme al lado de la puerta de su habitación
- Jeje, todavía no... -Contestó Thof, quien tampoco había visto la nueva armadura que le habían otorgado a Goll cuando ascendió de rango
- Pff, es horrrrriiiiiiiiiiiiible -Se quejaba él.
- Ja, ¿a ver que tan feo es? -Se abrió la puerta, una armadura blanca resaltaba al lado de la simple coraza de Thof. Tenía detalles en plateado y en azul marino. El yelmo tenía forma de cabeza de dragón y lo que serían los ojos del reptil de metal eran unas gemas celeste cristal- ...
- ¡¡¡JUA JUA JUA!!! ¡¡POR DIOS, QUE GANAS DE VERTE ENTRE LA DEMÁS GENTE VESTIDO ASÍ!!
- ¡¡ES VERDAD!! ¡¡¡ESTAMOS EN MONTSOGNIR Y YO VESTIDO ASÍIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII...!!! No lo puedo creer -Su cabeza cayó como si de repente se le hubieran deshecho los huesos del cuello.

Una vez fuera de la casa de Goll, Íewen y Thof trataban de aguantarse la risa mientras el otro sufría. La humillación reinaba en su cuerpo en ese momento. Apenas salieron de Montsognir, los Nordos explotaron por las carcajadas... Inclusive Goll.

- Bueno, jeje.. Ahora vamos paaaaaara el Norte si no me equivoco.

Caminaron unas horas hasta que se hizo la tarde.

- ¡Miren, ahí están los hermanos Gradppin! -Anunció la maga señalando a dos Utghars.
- Hola, Thilza -Saludaron los tres.
- ¡Íewen, Goll, Thof! Hace un montón que no los vemos por acá -Dijo una cabra conjuradora.
- Hola, chicos -Esta vez fue un gigantesco caballero
- Thaldaar, ¿te mejoraste de tu herida?
- Sí, ya puedo usar la lanza con la habilidad de antes
- ¡Perfecto! y... -Thof frenó. Iba a preguntar a dónde estaba el capitán, pero se extrañó por una razón más importante- ¿por qué ninguno comentó sobre el extrambótico atuendo de nuestro amigo, EL PALADÍN.
- Perdón, jeje... me la estaba aguantando
- Sí, no importa... Ya tengo bastante con ESTE PAR -"Este par" comenzó a reirse y no paró hasta que el capitán comenzó a hablar
- Mis Caballeros del Norte, hagan el favor de escucharme hasta que finalice
- Otro de sus discursos... -Se quejó Thof sin que lo escuche Berderik Makihfer.
- Esto que se nos ha presentado es muy extraño. Tenemos una misión que cumplir y ya me aseguré de que nadie nos moleste mientras investigamos el lugar. Tengo la autorización de Baldrik Hammerstriker para que nadie interrumpa
- Como lo suponía -Volvió a chillar- ese tipo siempre está metido en todo
- ¿Tal vez porque es el responsable de la Zona de Preparación de Alsius? -Se le hizo Íewen
- Será simple. Nos vamos a dividir en grupos, los guerreros de Rango Medio se van a quedar en la entrada de la isla. Los de Rango Aprendiz van a seguir al Paladín Goll. Los Magos de Rango Medio van a estar en el valle junto a los guerreros Rango Alto. Y los demás van a seguirme a mí que después les voy a explicar lo que tienen que hacer. Si hace falta quedarnos más de un día, tenemos equipo para acampar si hace falta. No se preocupen por el frío -Se adelantó cuando todos empezaron a quejarse- ...Vamos a dormir en el Valhalla. Ahora, ¡encaminémonos hacia nuestro destino, la Isla de Cristal!
- ¿Vas a cuidar bien a los aprendices? -Preguntó el chistocito- ¿o vas a dejar que se los coma un oso?
- Mmm... Preferiría que los osos me coman a mí. Así no paso frío jeje
- Dejen de bromear y vuelvan a "enseriarse" -Los calló ella- ¿No ven que esto no es cosa fácil? Dos Utghars que, supuestamente, conocen este lugar como la palma de su peluda mano, desaparecieron.
- ¿Pero a dónde se deben haber metido? -Dijo mientras Goll se quedaba pensando
- Creo conocer a alguien que sabe de qué se trata esto -Anunció mirando a Íewen. Esta se dio vuelta y se fue con los de su grupo.
- ¿Qué pasó? -Había algo que Thof no sabía y lo quería averiguar
- Después te cuento -El Nordo se adelantó, dejando a su compañero solo en medio de la gente que se dirigía a su destino: La Isla de Cristal

Fin del día uno (tarde)